Mezcla de lo natural con lo confortable

Para quienes alguna vez soñaron con despertarse al pie de los Alpes o caminar a orillas de un lago de aguas transparentes, Ginebra es la ciudad ideal. Mezcla de lo natural con lo confortable, sus imponentes mansiones, su puerto y sus fuentes la convirtieron en una de las más privilegiadas ciudades suizas. Ginebra tiene un rol importante en el mundo moderno por ser la segunda sede de la ONU después de Nueva York, además de representante de muchos organismos internacionales como la Cruz Roja, la Organización Internacional del Trabajo y el Centro Europeo de Investigación Nuclear. Una paradoja: por ser la ciudad natal de Calvino, padre de la Reforma Protestante, se la conoce como la “Roma del Protestantismo�. Sin embargo, hoy la mayoría de sus habitantes son católicos. El río Ródano divide a Ginebra en dos. En el sur, parte más antigua de la ciudad, están los distritos financieros y administrativos y dos antiguos distritos residenciales (Eaux Vives y Carouge). Esta zona se caracteriza por las calles estrechas y sinuosas, excepto a lo largo de la orilla del río, donde hay avenidas amplias y modernos muelles. La parte norte es más residencial: allí se ubican el barrio Gervais (donde están los mayores hoteles de la ciudad) y el de Les Délices (aquí se localiza la casa donde vivió Voltaire desde 1755 a 1758). No por nada Ginebra fue el lugar elegido por Borges para morir (Cimètiere des Rois).

Los imperdibles:

• Biblioteca universitaria
Presenta una exhibición permanente de manuscritos, libros y archivos relacionados con la Reforma. En la sala Jean-Jacques Rousseau se pueden encontrar elementos personales del escritor
Informes: frente a la Promenade des Bastions

• Casa Tavel
Es la casa más antigua de Ginebra. En su fachada pueden verse una serie de imágenes de animales y seres humanos hechos en piedra. Una recorrida por las habitaciones ayuda a representarse la historia de Ginebra entre los siglos XIV y XIX. En el segundo piso se evoca la arquitectura, las actividades religiosas y políticas de ese período a través de un despliegue de interiores y colecciones de monedas, fotos y telas
Informes: Grand Rue y Rue du Puits-St.-Pierre

• Catedral St. Pierre
Es un imponente edificio construido entre los siglos XII y XIII y ha sido una iglesia protestante desde 1536
Informes: al final de la Place de la Tacconerie.

• Distrito internacional
A lo largo de la Av. de la Paix se pueden encontrar los modernos edificios de las organizaciones y bancos internacionales. El Palacio de las Naciones es la segunda sede de la ONU y uno de los más atractivos centros de conferencias del mundo. El Salón de los Pasos Perdidos está decorado con mármoles traídos de los distintos países-miembros. En el Museo de la Cruz Roja, a través de una presentación en pantalla, se muestra cómo Henri Dumant (de Ginebra) decidió fundar un movimiento de ayuda a los heridos en 1863
Informes: Av. de la Paix

• Grand Rue
Calle antigua de la ciudad; resulta atractiva para el viajero por sus negocios de antigüedades, librerías y galerías de arte
Informes: entre la Place du Grand Mezel y Rue du Puits-St.-Pierre

• Jardín inglés
Desde esta terraza, en la que se halla un llamativo reloj hecho totalmente de flores, se puede tener una panorámica vista del puerto, de los montes Jura y del jet de agua
Informes: muelle Guisan (frente a la entrada al puente Monte Blanco).

• Jet de agua
Por ser la fuente de agua más alta del mundo (145m) es uno de los puntos turísticos más famosos de Ginebra. Su chorro puede verse desde varios lugares de la ciudad
Informes: muelle Gustave Ador.

• Petit Palais (Museo de Arte Moderno)
Considerado un “templo� de la vanguardia francesa y europea, sus obras comprenden desde el impresionismo hasta el surrealismo (1880-1930). Están en exposición obras de Chagall, Boudin, Monet, Renoir y Cézanne.
Informes: Boulevard Helvétique

• Place du Bourg-de-Four
En esta plaza, ubicada en el centro del “old town�, los viejos edificios de la Edad Media se mantienen en su estado original. Alrededor de una fuente se pueden encontrar galerías de arte, cafés y locales de antigüedades.
Informes: calle Hôtel-de-Ville y Place de la Tacconerie.

• Tours por el lago Léman
No hay lago que pueda competir con él en la zona alpina, ya sea por su profundidad (310 m) o por su extensión (58.000 ha). Los recorridos tocan ciudades tanto suizas como francesas que están sobre el lago. La duración de los viajes varía desde 1 hora hasta 11 horas, que lleva recorrer el lago entero.
Informes: Jardín inglés, tel. (022) 212521